0 - LOS MUNDOS INTERMEDIOS/ La nada y el Hombre - Jodi Maqueda





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LOS MUNDOS INTERMEDIOS

 

Encontramos pensadores aluden en ocasiones a cosas, y formas de ver o ver estas cosas (los entes) que cuesta, a priori, entender, hacerse una idea de ellas: como el ser, que supera dialécticamente el mundo de las formas, el mundus asdpectabilis, trasladándose a otro contexto, «más allá del horizonte de las formas», y de toda la "morfología / estructura cósmica", (siendo aquello que trasciende y rebasa todos los entes sin ser él mismo un ente, es decir, sin que ningún ente, por muy amplio que sea y se presente, lo agote) (1). Luego tenemos al Dasein  —pensado con la finalidad de repensar la tradición metafísica (ontológica) occidental— que “propone” el ámbito en que se produce la apertura de la persona hacia el Ser (Heidegger). Inicialmente, el término identificado con la existencia de la persona, pero Heidegger (Carta sobre el Humanismo de 1947) rechazó la interpretación, pues el Dasein, según este, alude a la persona como único ente que vive fuera de sí, y abierto constantemente al Ser y a sufrir una revelación de Él (este Dasein Heideggeriano despertó gran interés en la psicología debido a la renovada concepción expuesta del ser humano). Y por último tenemos La nada —ya de por si tema controvertido y difícilde la que Heidegger se ocupó, no sé si con hondura en su escrito ¿Qué es metafísica?, de 1930, donde tras plantear y elaborar la cuestión, aborda esta con un reiterado interrogante: «¿Por qué hay ente en su totalidad y no más bien la nada?». En la obra, se afirma que la nada le está vedada al pensamiento científico, porque la ciencia nada quiere saber de ella;  pero sostiene, igualmente, que la nada es significativa, pues sobre ella reposa o asienta el ser.

Como vemos, el tema ya se presta complejo incluso antes de empezar a pensar sobre este (intuimos que va más allá), pues de entrada se nos remite, o invita, a repensar la tradición metafísica (ontológica) occidental; esto es, repensar la ontología Metafísica occidental: buscar, identificar y aclarar las condiciones esenciales que determinan la identidad y la existencia de las cosas (entes) y hace que estas sean lo que son, pero de otra manera: superando la vieja metafísica (recordemos que para Heidegger la metafísica es el nihilismo propio y que este nihilismo consiste en el olvido del ser. La pregunta por el ser queda desplazada por la pregunta por el ente: Lo digno de cuestión para la metafísica es la entidad del ente: de lo que está-ahí) cuando Metafísica es, precisamente, lo que no está: lo que no entendemos bien, o no podemos percibir en el mundo presente. Y aquí brotan ciertas preguntas, que emborronan aun más el paisaje ¿qué es real? ¿Qué es existente o no existente? ¿Solo lo que vemos es real? ¿Existen otras cosas reales, fuera de nuestra percepción, que sencillamente no podemos ver ni percibir? Y ¿Aquello que si percibimos pero no vemos, no escuchamos ni tocamos, existe en realidad? Y por ultimo: ¿podemos considerar aquello que percibimos pero no vemos de alguna manera?

: todo difícil de concebir a priori, cuando entendemos que nos hablan desde un pensamiento racional y lógico, que desestimó el misticismo y las creencias (las formas de pensar de las religiones) desde hace siglos. Sin embargo, no es del todo así y, si bien no nos lo revelan —Schopenhauer si lo hizo— existe; pues encontramos una influencia mística oriental, abiertamente expuesta en (unos más que en otros)  muchos de sus textos: una aproximación a los mundos intermedios, aunque nuevamente redefinidos, que habían sido prácticamente desterrados del pensamiento occidental, y Cuya consecuencia entonces, dio como resultado que sólo nos quedasen dos niveles de pensamiento: Dios y la esfera de lo material o físico. Mientras este retornar, permite de nuevo pensar desde otro lugar: desde esos mundos intermedios. Pero ¿por qué los llamo mundos intermedios? Podría denominarlos también mundos invisibles, entendidos así en el mundo musulmán, pues estos jamás perdieron de vista estos mundos intermedios o invisibles que separan la esfera de lo visible del propio Dios y, que son básicamente dos: el de los espíritus y el de la imaginación: este último con clara influencia sobre la imaginería poética y de las ideas. Las obras de Ibn 'Arabî, por ejemplo, deben entenderse a partir de la naturaleza de estas esferas intermedias. El ser o la propia Nada En Heidegger, no es diferente, partiendo de una nueva idea, hacia la conceptualización de la Nada a partir también de ésta (la imaginación).

Heidegger la define la Nada como la completa negación de la totalidad de lo ente, es decir, de las cosas del mundo. Con lo cual no es ausencia, pues ausencia implica ausencia de algo determinado.  Lo interesante en este planteamiento no es tanto la determinación metafísica de la nada (su comparación con el no-ser, el vacío, la ausencia, la negación… o lo paradójico de que la nada pueda ser algo) como el modo en que nos vamos a relacionarnos con la nada, eso que Heidegger llama “experiencia fundamental de la nada”. Pero ¿Qué nos revela esa experiencia? “solo en la clara noche de la nada de la angustia surge por fin la originaria apertura de lo ente como tal: que es ente y no nada”. Dice Heidegger. Pero aquí hay un problema, una experiencia no es una reflexión sobre una experiencia, reflexionar sobre la selva no es una experiencia en la selva o de la selva: “La selva es la experiencia” (doy fe de ello). Imaginar la angustia tampoco es una experiencia de la angustia, y por lo tanto reflexionar sobre la angustia y la nada no nos lleva a experimentar la nada a través de esa angustia. Necesitamos una vía la experiencia.. ¿Pero dónde? Y ¿Cómo? ¿Podemos acercamos a ella, o tan solo podemos definirla  como hace Heidegger desde los límites y paradojas del lenguaje?

El mundo intermedio (imaginal) es un mundo sensorial, mientras que el mundo racional está despojado de estos atributos sensoriales. Por tanto, la facultad racional ('aql) relacionada a la filosofía funciona de modo distinto, y con distintos resultados, por medio de un proceso de encadenamiento de conceptos llegando luego a conclusiones, un proceso que el Shayj [Ibn 'Arabî] denomina "reflexión" (fikr). Esta reflexión, entenderla, nos puede llevar a entender la nada, y a entender al Dasein del ser,  incluso hasta nos puede orienta, dar una idea o camino de cómo llegar hasta ellos, pero toda esta reflexión no sirve a absolutamente nada, a nada cuando nos hablan de una experiencia / estado, que no se puede experimentar de ninguna manera. Lo que nos lleva a una filosofía que no sirve más que el asunto que se propone elucidar: nada.

Por el contrario, la facultad imaginal (jayâl) funciona por medio de una percepción interna que percibe ideas de forma sensorial. Por lo tanto, la percepción imaginal puede ser visual, pero esta visión no tiene lugar con los ojos físicos; puede ser auditiva, pero no se escucha con los oídos físicos. ((Así es como podemos entender por ejemplo, al Ser «no ser nada para ser, y ser nada»)). Precisamente es a partir de  sueños, que estos nos demuestran que todos tenemos experiencias de los sentidos no físicos. Para el Shayj [Ibn 'Arabî], la temática de la poesía, tan relacionada a los últimos escritos de Heidegger, por ejemplo, no es algo que se piensa como se podría pensar acerca de un problema de teología o filosofía dogmática por ejemplo. Más bien, se trata de algo que observamos de esa otra manera, con ese ojo interno y se oye con el oído interno. Sólo entonces se describe. Solo entonces se entiende; solo entonces se percibe.  [Texto Desarrollado a partir del escrito (fragmento) de William C. Chittick, Mundos imaginales: Ibn al-'Arabî y la diversidad de creencias, Mandala, Madrid, 2003, pp. 133-134]. 

así como un pensar rememorante, una noción particular, un pensar que se distingue del pensar representativo y lógico que, en distintas variantes, se ve presente ( en palabras de Heidegger) en la metafísica, la ciencia y la técnica moderna. Se trata pues, de un pensar que ni goza en la contemplación de lo que no necesariamente comprende, ni se afana ante la incomprensión, sino que tiene lugar como lenta y paciente actividad, que sigue la marcha, cuidadosamente; del asunto que busca elucidar, y que atiende a lo que este mismo le indica.

Este es un pensar al que se refiere Heidegger no forzosamente como el pensar de la filosofía, convertida hoy según él en un mero oficio o en una mera ‘sabiduría mundana’ (Heidegger, 2000, p. 19; GA 14: 5), y sin embargo se encuentra en estrecha relación con ella, como su destino o como la tarea en la que esta se convierte luego de su final. No obstante, más allá́ de su relación con la filosofía (o con lo que queda de ella luego de la superación de la metafísica), este pensar es en esencia una forma de praxis, esto es una acción humana fundamental presente, por ejemplo, en muchas practicas elementales del cuerpo, y una praxis que en su simpleza da testimonio de la cercanía originaria del hombre con el ser.

«Quien se conoce a sí mismo conoce a su Señor», reza un célebre hadiz muy caro a los sufíes que define a la perfección la idiosincrasia de la senda espiritual sufí. El ser humano posee entendimiento para conocer a Dios, aunque no siempre lo cultive, y memoria (dhikr) para recordarlo en todo momento, a pesar de su habitual desmemoria. En ese sentido, piénsese que los sufíes son conocidos en la tradición islámica como la «gente del recuerdo». En definitiva, el «homo islamicus» prototípico es un hombre que cree, sin por ello dejar de pensar, y que piensa, sin tener que renunciar a creer; pues la inteligencia no puede matar la fe, pero la fe no puede resultarle repugnante a la inteligencia.


Ser: Con la palabra «ser» se intenta abarcar el ámbito de lo real en sentido ontológico general, esto es, la realidad por antonomasia, en su sentido más amplio: «realidad radical». El Ser es, por lo tanto, un trascendental, aquello que trasciende y rebasa todos los entes sin ser él mismo un ente, es decir, sin que ningún ente, por muy amplio que sea y se presente, lo agote. Dicho de otro modo: el Ser desborda y supera dialécticamente el mundo de las formas, el mundus asdpectabilis, trasladándose en otro contexto, «más allá del horizonte de las formas», más allá de toda la "morfología cósmica".

Dasein: el propio Heidegger, en su Carta sobre el Humanismo de 1947 rechaza esta interpretación. De forma más precisa, podemos decir que Dasein alude a la persona como único ente que vive fuera de sí, abierto constantemente al Ser y a sufrir una revelación de Él.

La nada: en el existencialismo. Martin Heidegger se ocupó con hondura del problema de la nada en su trabajo breve ¿Qué es metafísica?, de 1930. Allí, después de plantear y elaborar la cuestión, la aborda con un reiterado interrogante: «¿Por qué hay ente en su totalidad y no más bien la nada?». En la obra, se estima que la nada le está vedada al pensamiento científico, porque la ciencia nada quiere saber de ella. Empero, se sostiene que la nada es significativa, pues sobre ella reposa o se asienta el ser.

(01) - ACERCA DE UN TEXTO / UN PRÓLOGO /INTRODUCCIÓN /jorge maqueda merchán / jordi maqueda

(SER DESDE LA NADA) 

Cuando me planteé —si se puede decir así (lo explicare al final) — este proyecto, aún no había dado comienzo el verano y no ignoraba lo que enfrentaba: había tiempo y aún podía renunciar y escaparme lejos de la nada, a Centroamérica o Indonesia, donde me queda trabajo por hacer, pero no fue así. Las propias condiciones personales y un estado de ánimo espectacular, sumada aquella conjunción de 7 planetas: que salí apresurado a recibir al puente de madrugada (24 /7/ 2022), saludando así a las estrellas y al universo, que parecían invitarme a afrontar lo que en otras condiciones hubiere sido imposible siquiera plantearme: como si ellos, los astros, hubiesen hecho su trabajo mostrándose alineados frente a mí y ahora yo debiese hacer el mío. No habría otro momento igual, entendí, cuando hacer el esfuerzo: que no sacrificio, pues nada sacrificado hay en el conocimiento y en buscar la verdad, sino agradecer. Así me armé de cuántas herramientas: libros y otros textos pude adquirir, con el fin no de alcanzar —que sería mucho anticipar— sino de dar comienzo una singladura de la que casi 3 años meses después, y lo que todavía queda (11/2022) momento en que escribo este texto (01/2025) cuando lo estoy revisando para integrarlo, solo puedo estar agradecido y con ganas aún de continuar, pues la exigencia intelectual y mental, no solo pone a prueba cuanto soy, sino también hasta dónde puedo dar y llegar, en pos de ese lugar al que casi nadie se aventura y menos aún llegan, donde habita lo que es y a la vez no es; lo que se muestra y oculta a la vez; lo que desafía a la realidad y al mismo concepto, aquello que algunos afirman revela finalmente al ser, y que ha llevado de cabeza a pensadores de todos los tiempos. Ese es el camino que elegí y que ahora sigo. ¿Hasta cuándo? Serán las Cárites, sindicadas a los misterios y el inframundo por las me dejaré guiar: ellas dirán

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—Sobre la publicación de un texto en el blog, no implica acabado: sino apartado—. De lo que se trata (de los textos un antes i mientras uno (es) fuera de los textos— Acerca de un texto— Prólogo de uno acerca de la razón de estos (los propios i de uno) sus textos—

Sobre La publicación de un texto en el blog, no implica estar acabado: sino apartado en progresión. Las fuentes de algunos textos, así como otros recursos, no se mencionan inicialmente en algunos de ellos o no al completo, pendientes de ser ampliados o volver a ser examinados (algunos no estarán ni corregidos) por incompletos, al estar apenas iniciados y o vagamente expuestos. Por el momento todo irá al blog (de la forma que sea y como sea, a fin de mantener algún orden) mientras trabaje en ellos. El blog es mi mesa de trabajo (inicial y final) y la naturaleza en su espectro más amplio, y la realidad (social) el ámbito en el que me desenvuelvo, pero no es una galería de exposiciones: si bien un texto refiere algo, que siempre será dado a interpretar (las imágenes, que si no referidas al texto, limitan de la interpretación de terceros a un contexto (el de la realidad y la experiencia en mi caso de los volcanes i una madre (que es del horizonte), esto implica un esfuerzo. Si alguien está interesado en cualquier tipo de información, o quiere decir algo al respecto, puede hacerlo a través de los comentarios

De lo que se trata (de los textos un antes i mientras uno (es) fuera de los textos ― y me gustaría explicar esto bien para no confundir→ es / en relación a unas experiencias (luego sensaciones propias) de las que entiendo un sentido i conocimiento de algo que todavía no se bien dilucidar. No se trata pues i-de un estudio a priori basado en unas ideas abstractas o algo parecido i (metodológico) de nada /sino de uno mismo / un intento trabajoso por entenderme / a razón de entender i-de los mismos textos el ser→ de un buen número de experiencias de uno mismo antes (entendidas cada una de ellas luego como acontecimiento los escrito de los textos / i-desde moverme antes de singulares percepciones propias i sensaciones físicas y propiciadoras después de una clase diferente de entender (a raíz de ser (del acontecimiento (→ uno en el acontecimiento i-de los eventos que de un horizonte dado se suceden) a raíz / o debido estar (antes de otro) mas luego ser→ de la necesidad uno mismo i de aquello en lugar i tiempo concreto de los sentidos igual (hacia el horizonte i de las cosas en él moviéndose uno de ellas i sus sombras / lo mismo de las estrellas que son del reflejo hacia→ i-de nosotros en el (horizonte) / es decir→ de una clase de entender dado de (i↑i) en medio común, pero en todo caso muy difícil de acometer por la razón (i-desde dentro) teniendo uno que ser→ i-del acto moviéndose hacia→ aquello que de los sentido no-es de una forma a la manera que se pueda razonablemente entender antes (y menos a priori) / sino solo i-siendo-ahí de aquello (el evento de uno que (es (i↑i) es) luego cuando el día ha terminado lo mismo que trae su mensaje... (i-de la lechuza aquello de Minerva conmigo después→ un entendimiento de lo mismo luego que-es de uno (i su conciencia de aquello en el texto) /esto es: principalmente entender y entenderme / de mi  mismo (en lo del texto después / la razón) de mis actos en el mundo como horizonte i (hacia alguna cosa después de conocer aquello que antes me rodea de una forma que luego no-es / del nombre que se le ha dado que no refiere del significante el significado de la forma del nombre (nada) / sino del verbo que del texto (oculto→ (es) refiere luego i-de un texto (1o /mismo/ vη-o→) que-es (ser→ de otro i un nombre que lo refiere de lo que tiene Nada i del olvido lo mismo / (luego–ser→  vη o-de (lo mismo antes i- de nada / no de la misma manera i- de muchas formas después (por la palabra recobrar-se)  i-de la nada llegar a ser→ de otra manera en todo (lo que de la experiencia es i es /

Entonces reúno aquí diferentes observaciones desde fuera i de la realidad propia hacia→ eso que-es luego adentro i de uno mismo después conciencia (lo de otro antes / que no-es de alguna cosa→ una forma concreta pero que-es de-i un texto después→ la propia experiencia del texto que-es arrojado de nuevo al viento / eso de él (i otro) que no-es de uno antes i luego (es→  i de un texto su conciencia → más que un pensamiento (lo) que-es / aquello mismo  luego de uno que el tiempo después ordenará de esos instantes i textos (que evolucionan de sí (hacia ser→ de una forma mayor en un abrazo i-que no lo mismo un texto donde solo vemos por delante  / lo-después que solo se entiende si-de atrás i antes lo fuera del texto→ uno i-de sus palabras en conciencia después del texto / desde otra manera i antes la misma forma fuera del texto i de un nombre (que no es solo el sujeto del texto) en La experiencia. 

Entiéndase este un camino entonces a descubrir desde otras formas i-de mirar para ver (de uno mismo) lo que pensar i-de(el-ser: después de la nada /no de la misma manera igual /luego encontrarse antes (él) de un viaje sometido después a permanente ajuste y revisión (i-de uno moviéndose igual fuera i de los textos lo mismo (él→ otro yo del texto) en relación a un evento  (de aquelloo igual antes a un torrente después (palabras) que van adquiriendo una forma desde algunas antes que son→ i-de lo mismo de antes luego de otra forma.

Pues dijo alguien (o lo escribió) una vez que el auténtico del aprendizaje es confirmar o de alguna manera o entender de algo (lo) que-es i  ya está dentro i-de nosotros moviéndose y Esto es-ser→ todas aquellas experiencias que nos hacen ser Únicos i desde las cosas concretas (que antes no eran de uno ( luego de nosotros con las que después somos de una forma de antes i-que es ser→ en relación: entonces... aprender sería un redescubrimiento (i de antes lo recóndito de uno mismo que es antes i es después de lo mismo) Y entiéndase pues: que-es a partir de una edad / cuando todos tenemos las suficientes experiencias i asiento para de un tiempo estar (i aquí de estas palabras me reconozco) para que instruirse paciente en ellas sea un arreglo / antes i de nada de querer ser uno de lo de todo otro lo mismo i-de sus experiencias e interacciones sumadas / luego en una reordenación fundamental después que nos lleva a comprender o comprenderse o comprendernos igual  de unas jerarquías i por tanto necesidades de uno ser→ hacia por encima de tener que estar en la miseria de la acumulación constante de información relativa a no-experiencias en el mundo (que no nos ayudaba a dar sentido a la anterior). Luego i-de forma literal  todo ya está ahí de lo preciso de uno en cada instante de una causa y es solo su redescubrimiento en relación a su sentido lo de antes después igual de aquellas experticias que son luego consecuencia del evento i lo mismo  causa de uno proyectado de una manea singular en la propia vida (hacia (→  todo lo demás: lo que entiendo constituye el aprender. Aprendizaje i por lo tanto no es por tanto un almacenar más información sino ir reconociendo i reconociéndose uno de misma información ya almacenada→ reconstruyéndose (de esa información i propias experiencias) y su causalidad en tanto aquellas nos determinan después del presente y encontrándonos de este blog en una serie de textos (que son lo mismo de uno fuera en su carácter exploratorio i-que requieren de  carácter afuera del texto / pero igualmente i-del texto uno precisa de cierta aptitud mental para poder reflejarse (de aquello que-es de otro / luego de un texto) i-a profundizar de un torrente desde que se siente / arrastrado igual de aquelloo desde aquel punto en el que uno se reconozca inmerso / i del texto / no de la misma forma igual de alguna manera fuera del texto / pues al igual que hay estrellas que brillan para quienes al cielo miran / la realidad solo existe de una mente capaz de reconocerla (reconociéndose de ese nuevo horizonte que aparece ante el) .

Acerca de un texto: “Un texto” (habrá de ser, siempre, un texto de una persona “concreta” (su conciencia (hacia→) otro, (persona concreta) que lo pueda reconocer y (←reflejarse de él) (de su intención (→motivo del texto←) reconociendo del texto, el mismo motivo de él): como (aquello) que (“es”→ (λóγος) (palabra→ como forma del pensamiento y verdad), como un (Τέλος) Así todas las cosas hechas, incluidas las pensadas por los seres humanos tienen un telos (o Motivo, concreto del Texto → una (ἰδἑα) razonada (en una forma, que podemos reconocer (igual, a de otros: y reflejarnos (de esa forma) a la vez, que reflejar (proyectar→) nuestro propio (λóγος) pensamiento verdadero y reflejo), lo mismo, de otra manera igual, (de otra forma→ por la palabra), y por la que otros (el otro) que habrá de ser: una o varias personas concretas→ luego se puede reflejar igualmente en nosotros de ella / “seria por tanto sabio decir – dice Heráclito- que junto a él (entendemos el pensamiento y por medio de ella: la palabra / añadimos nosotros)→ todo es uno" y conciencia).

Prólogo de uno acerca de la razón de estos (los propios i de uno) sus textos : Apenas todavía no daba comienzo el verano, cuando un buen amigo me preguntó en el pueblo (Aceuchal), a dónde iría este año de viaje —de expedición quería decir—, pues no publiqué nada al respecto de viaje alguno —como si las redes sociales fuesen el altar, donde suplicamos intermediación a la vestal que encarna nuestra sociedad, frente a esos falsos dioses que muchos honran con piedad y franco servicio en un culto vano, hacia unas deidades que no lo son, pero siempre observan y murmuran. “Por supuesto”— le contesté.  Claro que tengo previsto viajar este año. — añadí seguidamente. Si bien, nada hacía sospechar tras mi sonrisa la respuesta que aguardaba a la siguiente pregunta, que anticipa siempre la atención los dioses (אלוהים) conocedores de aquellas almas que alzan sus ojos a las estrellas y encuentran un universo digno de admiración: que no observan tradición alguna impuesta por hombres, ni temor, a cuanto desconocido ahí fuera les aguarda. “A la Nada”— le respondí. Sus ojos como platos rivalizaban con mi sonrisa cada vez más amplia, sabedor de aquello expuesto ante quien jamás pensó tal lugar como proyecto, interpretando mil y un significados de lo que no se termina de entender: como aquellos, que de pronto reconocen un día los poderes que gobiernan trabajado desde el cielo. 

Lo cierto es, que a menudo quien gusta de viajar, gusta igualmente de diferentes maneras de hacerlo y a veces, aunque sea hoy en día algo excepcional: a través de aquellas formas que complementan y no alimentan el ego. Hay personas que deciden emprender un viaje dedicado a los otros, que observan y murmuran, y los hay que emprenden su camino como una modesta senda de autoconocimiento, un estar consigo mismo. En mi caso, explorar, como significante apunta adquiriendo mayor sentido cuando en algunas de sus formas trasciende ese: “su significado”, hallando en el silencio una señal particular y vía que puede encauzar hacia aquel excepcional destino. Y Ahora: Concentrémonos en el nombre→ Nada; en que quiere decir→ Nada, y en el título del texto→ Nada… Luego ¡Nada! ¡Nada! ¡Nada!.. Y el tema (i de nada uno) lo daríamos resuelto. Pero Hay dos tipos de personas que ven cosas, y las que las ven de forma accidental alguna cosa y que de forma accidental luego del fenómeno les persigue a todas partes. Los primeros hablan de ello sin saber en absoluto de lo que hablan, pues una visión accidental no aporta conclusiones, más es una gran confusión.. Luego están los otros, los que llevan tiempo en relación con algo i sabiendo de algo lo que hablan / pero no lo hacen... no lo harán jamás, y por qué no hablan.. la razón: la misma (es) por la que si algo te revela, algo, a ti, y no lo hace en una plaza (es) porque entiende que lo entenderás/ de aquello / lo que uno de si mismo en relación a aquello luego entienda.. (Se trata de una relación (de conocimiento) no sé muy bien de qué tipo de conocimiento pero una relación que compensa (lo mismo una amistad) que no quieres perder por nada del mundo... ni cámaras, ni videos, ni gente alrededor… “solo i-de tus ojos (es) lo que se presenta”.

Y ¿No es mágico eso que llaman Nada, y eterno todo aquello que no-es i es del alma?; ¿no es mejor Nada i no-ser de tanta insolencia? Se enorgullecen por lo que no son, y cuánto más por lo que no saben y no conocen: que los rayos del Sol son más nobles y divinos en verano, y los manantiales de la tierra, los bosques, y el rocío de la mañana, el alma refrescan. Pero  y pregunto: ¿Pueden hacer ellos algo que se le parezca? Pueden matar pero no pueden dar vida. Se preocupan, traman y maquinan, pero ni con sus artes pueden entender, que no quiere ser resuelto aquello que les mira, mientras las estrellas observan siempre por encima. Paciente naturaleza desnuda que los sufre y tolera; pero no podrán interrumpir del otoño (luego ausentarse) y pretender la primavera. Así es y realmente poderosa toda ella! Que les permite vivir y destruir, y pese a eso, y pese a ellos, y pese a todo ¡la sigue siendo la belleza de la nada cuando en primavera la naturaleza (es / de lo que florece i-de ella) todavía más bella! - Jorge Maqueda Merchán - Jordi Maqueda.



DESCONFIAR (antes) DE TODO / CUESTIONARLO (luego) TODO

¿POR QUÉ ME CUESTIONO SOBRE LA NADA?
¿TIENE ALGÚN SENTIDO HABLAR HOY DE LA NADA?
¿POR QUÉ ESTAMOS HABLANDO AHORA DE LA NADA?
— (Un Tiempo / Un Pensamiento) —
SOBRE LAS REVELACIONES, SOBRE LA REVELACIÓN DE LA NADA
— (Primeras objeciones a la idea de la nada en Heidegger) —


—Por qué me hago preguntas (Desde el pensar de uno (él) después—Por qué desconfío de todo—Luego y si desconfío de todo i no de todo lo que / es decir: entiendo que todo no-es lo que es / me estoy cuestionando i refiriendo a cuestionarme sobre nada— Por Qué estamos hablando de la nada y no de otra cosa— Luego ¿tiene algún sentido hoy hablar de la nada? es necesario? — Sobre lo acertado o no, de preguntarme acerca de la Nada— 

Porque me hago preguntas (Desde el pensar de uno (él) La primera vez: compre un libro de filosofía fue a los 16 años de Nietzsche, Humano demasiado humano -1886, donde revelaba, a su modo, el padecimiento del hombre en el mundo. Para mí, amante de la astronomía (A.A.B.) y la naturaleza (UES: Unió Excursionista Sabadell), entonces con poco más de 16 o 17 años de edad, y que no quería estudiar, fue como descubrir otra dimensión antes desconocida, tan intrigante como el propio cosmos que estaba descubriendo en la Asociación Astronómica de (Barbera del Valles) donde era vocal de observaciones con Josep Puig. Desde entonces y a la par, libros de filosofía, astronomía y revistas de ciencia saturaron las estanterías de mi habitación, como ahora la memoria del ordenador. Leía, muchas veces sin entender y volvía a leer, luego a quienes me explicaban aquello que no entendía, envuelto en esa felicidad absurda que con el tiempo entendemos del conocimiento parcial e incompleto que entendemos ( de la explicación de otro) de las cosas de antes (que por nosotros mismos no hemos experimentado) y lanzando después (con doble voltereta y tirabuzón, cayendo no pocas veces de plancha) a vivir mi propia aventura: conociendo aquello que de salir a la calle surgía sin buscar: una tela de araña en el centro de su tela por ejemplo llevármela de ir corriendo por el campo (como lo mismo i-de buscar en la oscuridad en la noche entre las estrella de un Júpiter (ahí) entender que veía galileo de mirar por el telescopio sus satélites galileanos (o no lo mismo / los cráteres de la luna como las manchas solares hallándolo de buscar luego observando de la propia naturaleza con mis propios ojos). luego de ese modo (con sus luces y sombras) ha transcurrido buena parte de mi vida, entre libros escogidos y salidas continúas al campo y las montañas, viajes: selvas, desiertos y volcanes, (accidentes, enfermedades, caídas) sumados esto a una creciente afición tardía por las plantas y la jardinería.

Pero entiendo que mi caso no es único —y no refiero mi afición tardía— pues son muchas las personas, que en algún momento comienzan a advertir esa terrible seducción, hacia temas que van más allá de su quehacer cotidiano. Digamos, que son seducidos hacia cuestiones más profundas. Preguntas, que como a otros en el pasado y desde tiempo inmemorial han inquietado de manera fabulosa tanto a comunes como notables, pues todo ser humano, en algún momento de sus vidas siente de esa dolosa necesidad de saber, llevados o dirigiéndose entonces hacia eso que llámanos filosofía (“incluso sin ellos mismo saberlo: son filósofos —Calvo, 2003:) haciéndose preguntas e intentando comprender a los otros —añado: sin comprenderse y saberse primero a sí mismos, o sin apenas experiencias puras en la vida—  pero cuestionando y dando respuestas al origen del mismo cosmos. En palabras de José María Calvo, “el ser humano es filósofo por naturaleza, y si se le ofrece la oportunidad se hace preguntas a todas las edades” (Calvo, 2003: 36). Y, si se le deja, créanme (de mayorcito), este te dará todas la repuestas (explicadas para otro (lo que no conoce) … del mundo: incluido de la existencia i-de los planetas de más allá, aunque el que dice conocer jamás haya saldo de su pueblo en toda su vida (véase Kant). 

Luego, i del hecho que-es comprender ahora  / lo dicho" antes de las cosas para algunos, en tanto ha como estas cosas le son explicadas / y no-son de la experiencia de cada uno / luego es entender (del otro la forma en que (él) no-es de alguna cosa o ninguna experiencia antes de lo mencionado después del texto / lo que nos ha llevado a algunos a dotarnos de valiosos mecanismos de salvaguarda / por los cuales vemos recompensando ese entendimiento  / cuando vemos de la ignorancia (lo absurdo de un reconocimiento de parte de  otros→ que lo mismo solo es posible cuando  ignorantes (de aquello los otros son lo mismo ) no-son de la propia experiencia luego lo que hablan igual diciendo: de nada).

Pero este entendimiento parte de una necesidad real i propia de conocer de uno mismo las respuestas: una necesidad pues tan real y apremiante que no nos deje dormir 8 saber que lo que sabemos es sabe i opinion de otros). Como por ejemplo cuando escuchando a algunos opinar o hablar de nada observábamos de la ausencia / la ausencia primera i-del sentido común que no-es cuando es imposible aquello que pretendidamente ausente i-de alguna forma→ se nombra de ninguna cosa “la forma de nada”: Como el mismo Sócrates antes nos advierte (lo mismo incluyendo la forma de nada concreto) y “que una definición puede no describir con precisión algo y que no hay una definición absoluta para cualquier cosa, incluyendo la forma. (Plato, Benjamin Jowett (1946). Meno) luego leamos: La forma define el Conjunto de líneas y superficies que determinan la planta, contorno o volumen de una cosa, en contraposición a la materia de la que está compuesta. Pueden existir cosas cuadradas, redondas, o rectangulares de distintas materias, pero siempre tendrán alguna forma. Concluyendo, que forma es la esencia de las cosas, porque hace que sean eso y no otra cosa (Aristóteles /1 (Menón de Platón). Y de este modo la forma que no-es puede ser (explicada) i no-ser o no estar aquí o allá (de una forma i de una cosa concreta en el medio i-del horizonte común (pero ser explicado) de La forma que no-es i no puede ser ( de ninguna forma / lo que no es al menos de una cosa): pero que-es  ( i del texto de uno) lo que fuera del texto i de uno no-es /ni puede ser) / lo mismo que tiempo después (es)  siendo materia de preocupación en forma de abstracción (del significante del nombre que define del significado (ausencia de aquello (ausente de un forma) que sin estar aquí o allá, puede ser de la idea percibido en el pensamiento de uno (antes contemplación) lo que no-es i puede ser→ luego de alguna manera (lo que no-es i es) abstracción que puede ser después del juicio de unos,  pero sobre todo imaginación… y de tener forma / la forma (es) de nada I- De ahí, que algunas personas se cuestionen lo que se da por sentado  y desconfíen o desconfiemos y lo hagamos y partir luego de lo mismo y de nada (i.o de esa ausencia propia de uno después llegar a ser del saber de la propias cosas (que antes de otro conocer i-de uno mismo experimenta) Y Ciertamente, desde muy pequeños, ya nos acercamos a las cosas para comprenderlas así se nos representan a los sentidos (aunque no sé si exactamente, entonces, “desde muy pequeños “exactamente nos acercamos para comprenderlas: yo “de pequeño y de no tan pequeño” mataba y quemaba hormigas). Pero es un hecho, que comprender (aunque creer comprender seria lo correcto) la razón de las cosas, en tanto a estas cosas son, se nos representan y las entendemos “por su últimas causas”, ha llevado a algunas personas (sobre todo a los filósofos) a sentirse recompensados (buscando mas del reconocimiento de los otros) que por su propia búsqueda de la cosa y de aquellos resultados hallados de uno mismo en ella. / luego no  siendo ni siquiera de los resultados de las experiencia de los otro (cuando de la filosofía contemporánea hablamos) pues los resultados de las indagaciones de esta filosofía no aludan a los seres ni las cosas de causas primeras (esto es: antes i de uno un saber, y por tanto, a medias y soy generoso hablando de filosofía) siendo entonces dicho saber (ese que encontramos de toda nuestra historia moderna escrito) un saber (razonado) solo a partir de ideas, a partir de sus últimas causas (de los otros) explicadas de uno, y no de las primeras causas que son las del que es (del evento i sus causas después (como consecuencia de un testo)  , y esto creo esto está muy claro. Como de claro se resuelve que de cierto, no sabemos (objetivamente) de la realidad (natural) de sus primeras causas i de uno mismo: nada, más allá de lo que creemos de nosotros un saber / adquirido del no ser de la experiencia los otros que  parten  (del sujeto del deseo (de un saber de los otros), y no de una necesidad real (del individuo) de conocer las cosas (entender de  esas primeras y  sus causas): por tanto hablo de una necesidad tan real (como la verdad que busca) y que no nos deje descansar, cuando la advertimos de un destello de luz que nos descompones, y que te lleve “a rastras de los pelos” no a los libros y a sus respuestas, sino a aquello que origina las preguntas: a la experiencia pura, propia y sensible de los sentidos, dirigidos hacia todo aquello que nos rodea y afecta de la naturaleza, de la que somos parte afecta. De ahí, que algunas personas empecemos a problematizar todo aquello que se da por sentado de aquellos libros (y de cualquier cosa razonada) y sus certezas, cuestionándonos a partir de la falta total de saber “real” que sentimos: una carencia de conocimiento de la que el ser humano hoy no se sabe objeto, pues “para apropiarse algo (conocimiento de algo) no se trata de entenderlo (subjetivamente), hace falta sentirlo y sentirse hacia él (proyectado/ reflejado en el), tanto como él hacia ti”. En este sentido (proyectado por la luz) se origina el conocimiento primero de ser, (estando) siendo frente a algo y reconocerlo (de la luz que nos refleja), parte, igualmente de nuestro ser (mas allá del yo, proyectándonos igualmente por la luz hacia aquel). Luego mi rechazo firme hacia esa filosofía centrada en la nada y en nada, y la aceptación exánime y apática de esta Nada por parte de otros… es lo que hace que (desconfié) y luego me pregunte, más allá de preguntar o de preguntarme sobre cualquier absurdez ¿por qué buscan la nada? ¿Por qué hablan de ella? ¿Están ciegos? Es que se ha vuelto ciego todo el mundo y ciega con ellos la razón; cuando a mi alrededor, a nuestro alrededor el mundo está lleno de vida y luz, y hay de todo, en todas direcciones (inabarcable) pero para lo que tenemos respuesta de todo / pero nadie habla desde allí / siendo esta la razón de me que haga preguntas y me cuestione desconfiando todo, lo que dicen que es de una manera ( lo que yo conozco de nada)  

Y  porqué desconfío de todo Quizá desconfiar no sea la palabra ; sin embargo, para mí es natural esta actitud de cuestionar y estar frente de todo y todos (los que dice saber ). Solo tengo que echar un vistazo y absolutamente nada me revela que en adelante las cosas puedan ser diferentes, cuando la misma historia me da la razón: si no es más contundente que (de mi propia experiencia por mis padres que decían saber) , en tanto a mostrar como aquel conocimiento (o certezas) que se creían inmutables permaneciendo por siglos, finalmente eran finiquitadas y sustituidas por otras, que se daban por más precisas aunque igualmente incompletas; luego, lo que antes parecía inmutable i despues  que tardaba siglos en cambiar hoy lo hace apenas en unas décadas (de un instante algo /  que desconocemos cuando se movió, moviéndonos a todos). Y es en este sentido (es) cuando parto de la “certeza absoluta”, que todo conocimiento de las cosas (que entendemos son una forma) es incompleto y por lo tanto, las interpretaciones o explicaciones posibles acerca de esas mismas cosas: qué son, luego a qué sirven y su razón de ser de esas cosas, es, igualmente incompleto, más allá de un conocimiento propio i por tanto relativo de cada uno, dada a nuestra incapacidad de entender en tanto lo que es ( a cada uno) luego lo que realmente son, pues lo que entendemos de estas cosas, es (repito): en relación directa a nuestro entendimiento i-de cada uno / o capacidad de entendimiento y lo cierto luego es, que de lo concreto i- de cada uno aquello→ lo que sea del medio) “No sabemos casi nada” pues no somos del acto moviéndonos a conocerlo / estando de la opinión i la experiencia del otro ( en lo relativo a aquello de lo que hablamos después). Pero esto no lo afirmo yo: lo afirmaría ante notario cualquier físico o científico después de publicar su trabajo o experiencia de alguna cosa, al observar que su trabajo luego (que-es) aquello de su experiencia antes i un conocimiento propio de algo (aquello concreto que observo) / que luego (no-es) de los demás y nada propio (de los otro) / que hablan de aquello lo mismo luego como propio / que-es el conocimiento de uno moviéndose hacia  entender de una cosa ( que luego no-es / sino la opinión de otro), y casi más importante, parto igualmente de la premisa sobre nosotros, nuestra mente: poco evolucionada, pues somos una especie que apenas no ha salido de las sombras: egoísta, que asesina, esclaviza, y que destruye cuanto pisa incluso a sus propios semejantes: a veces vecinos y hermanos, y no hablo exclusivamente del pasado lejano, pues si bien la historia ha registrado períodos de crueldad y eventos de extrema barbarie, cuya atención a estos pondría en aprietos a quienes pretendieran rebatir el salvajismo inherente a nuestra especie, así como los argumentos de quienes entienden la concepción pesimista del hombre.  Pero como dije, no hemos de mirar muy a tras, basta prestar atención al siglo pasado, un siglo XX particularmente ejemplar a la hora de mostrar el catálogo de los horrores propios a nuestra especie. Los cien años que cerraron el segundo milenio han sido pródigos en alumbrar, a quien tuviese aún alguna duda, aquellas circunstancias que exhiben el singular y profundo horizonte de maldad y ensañamiento de nuestra especie, llegando a instrumentalizar (racionalizar): normalizando procesos de arresto, custodia y exterminio sistemático de semejantes. Así pues y sobre esta triste realidad de nuestra mente, perversa/ entre otras muchas cosas mejores o peores, todas las interpretaciones a cuantas cosas queramos entender o dar de esas cosas, lo son desde y a esa mente, igualmente, pobres, vagas y propias de ese “individuo poco evolucionado” que las percibe y describe. Y la nada, su interpretación filosófica, no sería un mal ejemplo: revelada como hija del hombre y de su tiempo. Pero me quedaría corto, muy corto solo al decir que este individuo apenas atisba reflejos, que no percibe la esencia y menos la comprensión completa de nada de lo que observa o toca: la luz o las cosas bañadas por esta, así como de todas aquellas sustancias y cuerpos que no puede observar e por ello ignora, y que de estar a otro nivel evolutivo —si esto es en un futuro posible— serían posiblemente interpretadas de forma muy distinta, más próxima la realidad de su ser y razón de ser. Sin embargo: “El hombre mejorará no solo cuando se le muestre lo que es, sino cuando el mismo lo acepte”. Este hombre, este ser fascinado en buscar otros planetas mientras destruye el propio, y que piensa en descubrir civilizaciones lejanas, en lugar de acabar con la miseria y el hambre de sus semejantes: este hombre está condenado al menos mientras insista en ser, en lugar exhortar aquello que puede llegar a ser. Debemos entender que Nuestras funciones mentales son el reflejo de un proceso de selección natural que se originó hace cerca de cuatro mil millones de años, donde la evolución es un continuo despertar a la realidad, determinado muchas veces por el proceder o dirección que toma la especie (enderezar el rumbo es necesario): tomar una buena dirección moral. El mundo y el cosmos a todos los niveles, comienza a mostrársenos como una vasta inteligencia de un inmenso sentir que, quien sabe, pueda juzgamos en cualquier momento. 

Luego y si desconfío de todo i no de todo lo que-es / es decir: entiendo que todo no-es lo que-es / me estoy cuestionando i refiriendo a cuestionarme sobre nada.  El conocimiento es un edificio que se levanta con el tiempo – dicen, y las conclusiones derivadas de un texto que escribimos hoy mañana serán otras, seguramente más certeras. Por ello y aunque Nada me ha intrigado desde siempre, como al preguntarme (observando el cielo por la noche), por ese espacio aparentemente vacío entre las estrellas (donde hay y he visto planetas), nunca antes me atreví a cuestionarme seriamente y menos aún a escribir públicamente acerca de una materia en evolución (que el físico astrónomo observa de ese espacio aparente mente vacío (unos objetos) que uno ve peo no bien entiende / donde para (es) otros nada / lo que planteaba profundas y apasionantes cuestiones (a decir de hoy en día / cuando vemos miramos i vemos de un telescopio) lo que todavía  muchos (anclados al pasado)  parecían ( a lo evidente ) no hacerle caso: unos la detestan y otros la ignoran, lo cierto es que observé que todos se acercan a ella en un momento u otro, aunque solamente sea para manosearla, encontrándose, por esa misma razón, hoy sustentada como una tela de araña por diversos hilos —unos más flojos que otros— que penden de muy heterogéneas ramas alimentadas por la física, filosofía, matemáticas, astronomía, cosmología, lógica, matemáticas: lo que resulta, que hablar hoy de la Nada es irrumpir en “Todo”; guerrear contra “Todo” y contra “Todos”, más aún en el ámbito sajón y a la orilla de la ciencia. Precisamente y para poder obrar con cierta propiedad, que no certeza “de la Nada” incursionando en ese Todo, se priorizaba primero un cierto bagaje de nociones “transdisciplinares” o sustrato de conocimientos: lecturas y nuevas nociones actualizadas y bien asimiladas, además, de una aptitud mental holística que permitiese entender la Nada desde toda perspectiva que se dé y reconozca abierta a hipótesis a considerar, y de ese modo poder refutar y poder hablar de otra cosa 

Por Qué estamos hablando de la nada y no de otra cosa Esta es una muy buena pegunta. Por qué no hay más debate sobre la felicidad, o sobre la luz, o el amor, sobre la consciencia; mejor aun, por qué no hay debate sobre el asalto a la mente de los jóvenes con las nuevas tecnologías, sobre el suicidio juvenil.  Por qué, nos preguntamos por la Nada, qué sentido tiene (para nosotros quiero decir) hablar de la nada: hablar de lo que no existe y por tanto de lo que no podemos hablar, pues no podemos saber y menos entender cómo es aquello que no existe. Estas palabras que escribí, y se leen al principio de este texto están ahí por una muy buena razón: Concentrémonos en el nombre, en que quiere decir, y en el titulo del texto… ¡Nada! ¡Nada! ¡Nada!..  Demos pues, el tema por resuelto.  O dicho de otra forma ¿Para qué pensar en la Nada si esta idea no contribuye en algo productivo en nuestra sociedad actual? Sin embargo, al otro extremo encontramos esta otra cuestión… ¿y por qué no la nada? cuestión que se plantea hoy entre muchos los “filósofos” (quiero decir: profesores y estudiantes de filosofía). Haciendo oídos sordos, como el mismo Heidegger hiciese de sí mismo, o del mismo Parménides lanzándose de cabeza a por la Nada, y el rebaño de acólitos hoy le fuese aún detrás, cuando de cierto se trata de una pregunta, que como advirtiera el mismo Heidegger, no solo nos parece absurda e inútil, sino que lo es, pues no sobre­pasa los límites de la lógica y del sentido común, sino que carece por completo de toda lógica y sentido común. Pero si lo filósofos se preguntan « ¿Y por qué no la nada?» yo, puedo preguntarme, por qué el estado financia con dinero público, con mi dinero, estudios sobre la nada que yo mismo he leído a lo largo de este proyecto, y que visto lo escrito nada aportan a la Nada, a nada llevan a las personas y mucho menos ni a ningún lugar: en resumen, que no sirven a nada (no digo para nada o nadie) pues quien escribe cobra y muy bien por ello. No quiero decir con esto, que no se tenga que pensar, o pensar la nada, o en lo que sea: pues todos sabemos que los elefantes vuelan cuando no los miran, yo lo hago ahora (pensar en la nada, quiero decir), pero no con dinero público, dinero que haríamos mejor en gastar en lo inmediato preciso y acuciante, pues antes que la Nada, que no existe, está el hambre que sí, existe, y existe el sufrimiento y las personas que pasan frio en invierno, y las que mueren de sed y calor en verano. Quizás, el peor nihilismo de todos consista, más que en negarse a ver y escuchar, luego esforzarse en hacerlo a partir de la nada. Pues nada hay de la nada para el hombre sino oscuridad, y… mucha hipocresía

Luego ¿ tiene algún sentido hoy hablar de la nada? es necesario? No es la necesidad de hablar de la Nada, como lo es tratar o volver de nuevo el tema de la Nada, pues el desconcierto manifiesto es evidente, en tanto a concepto de esa «Nada» manoseada y que habiéndonos cuestionado tantas veces por ella, de manera prosaica y ramplona está hoy presente en la sociedad —aunque planeando de un lado a otro de forma errónea en el mejor de los casos— filtrándose, cada vez a todas sus capas, que esgrimen su nombre de forma ambigua o fuera de lugar: un absoluto, que se define como la "ausencia / inexistencia" / "lo que no es" y, sin embargo, observamos habita “desubicada” en un espacio “siendo” en lo finito de cada Ser que la nombra o piensa. Pero la pregunta es: (¿Tiene sentido hoy volver al tema de la Nada?) y la respuesta es: por supuesto. La razón principal es que es preciso discutir, aclarar sobre lo que este nombre dado (la nada) representa, pues parece que nos hayamos olvidado que ya fue desestimada por el mismo Parménides que la reveló: “Pero (lo que) nada (es) no es (para ser). A estas cosas te ordeno poner atención, pues de esta primera vía de investigación te (aparto). Y luego también de aquella por la cual los mortales que nada saben yerran, bicéfalos, porque la inhabilidad en sus pechos dirige su mente errante. Son arrastrados, sordos, ciegos a la vez, estupefactos, una horda sin discernimiento, que considera al ser y no ser lo mismo, y no lo mismo. La senda de ellos es revertiente, pues jamás se impondrá esto: que cosas que no son sean. Tú, empero, de esta vía de investigación aparta el pensamiento:” (POEMA DE LA NATURALEZA — PARMÉNIDES), mientras la realidad hoy es otra: y se la considera, si bien no parece que hablemos de la misma nada/ Nada. La Nada absoluta ha sido (tras ser concebida su idea y desestimada después) luego, por siglos olvidada, “ocultada ¿?” o cuando no (dicen algunos) escondida a lo largo de la historia — quizá, y sabiendo de su atracción, pero, igualmente de su inutilidad, se decidiese ocultarla no en el sentido que muchos insinúan, como si ocultare algún misterio sapiencial: sino por lo fútil e insustancial de su observación). Sin embargo, curioso parece ahora, cuando nos estamos quedando huérfanos de ideas ante los limites que muestran nuestros instrumentos científicos, que aflora de nuevo esa Nada, quizá como alternativa a un deseo — no tengo yo tan claro si de esclarecer, o de ser o aparentar cuando la recurrimos—, al punto de pretender monopolizarla hacia intereses propios; pues la Nada hoy parece ese espacio propicio a nuevas aperturas, e inicios, nicho de nuevas ideas: una Nada que se hace presente hoy no solo en la negación, sino también en las matemáticas: en el cero; en la física: en el espacio; lo hace en el silencio, acaparando y agotando esferas. Luego (agotadas ya todas las esferas, o posibilidades) finalmente, la Nada que queda al hombre, si quiere conocerla y si desea la verdad, es aquella misma Nada a la que renunciaría el propio Parmenides, y que quizás incluso la filosofía tema revelar, más allá de donde o como surge: cuando lo que comparece en revelación no vendrá dado en palabras: la losa que entierre definitivamente toda vana especulación

Sobre lo acertado o no, de preguntarme acerca de la Nada Y públicamente, desde mi perspectiva, el enriquecimiento que supone esta incursión ya de por sí lo justifica. Pero, además, y si sumamos que la Nada no es tema marginal, estando presente en temas de la actualidad; cuando su importancia inicia hoy en día en la misma consideración del origen del Universo, la vida y el hombre, así como todos los cambios reales y abstractos de nuestra realidad social, se entiende mejor mi actitud; y más aún, cuando algunas interpretaciones de la Nada actualmente, observo, abren las puertas a la instauración de la (no diferenciación) entre el Vacío y Nada, diluyéndose la una en lo otro —no reconociendo ya aquello en sí mismo, sino como lo conoce o le parece lo conoce el hombre— así, nuestra relación con la nada, surge rehaciéndose a partir de un fondo, donde pronto no se distinguirá lo uno de la otra, y  la nada dejará de ser la Nada.

ANTES  I-DESDE OTRO LUGAR UNO MOVIÉNDOSE  (I- DEL IMPULSO SER HACIA→    I- DE LOS PROPIOS LÍMITES D→ EL HORIZONTE  PROPIO / DONDE LA NADA (ES) DE LOS OTROS

— «La Nada» en si misma "es" aquello, y a decir de un (concepto) —La ontología (estudio del ser) está asociada estrechamente con la cuestión de Aristóteles sobre "ser en cuanto ser" —En cosmología, la materia —Una matriz (de campo energético (M) —La materia antes y que "es"—Algunas preguntas ontológicas, como por ejemplo ¿Qué es la materia? O ¿Qué es Dios? —Ontoteologicamente hablando de la ontología del ser (de las cosas) y la teología de Dios—Desde ¿Qué es metafísica (24 de julio de 1929- Heidegger)—Heidegger «volver a las cosas mismas»—Schopenhauer percibió la tendencia a rechazar todo lo relativo a la nada en Occidente —La "Nada" es el vacío que queda como una desesperación ciega que destruye este mundo—Pero si no hubiera un "aquello" no habría un "esto"—.

La Filosofía, nace alrededor del s VI a. de C. en el momento en que es planteado el que se considera el primer problema filosófico expresado en la pregunta por el arché de la physis (Naturaleza), el cual, según Guthrie, se referiría “en primer lugar, [al] estado originario (de la materia→ (del ser después) y a partir del cual se ha desarrollado lo múltiple heterogéneo en el mundo y, en segundo lugar, [a] la base permanente de su ser”. Una pregunta que implicaría asimismo una nueva estrategia de respuesta basada en principios racionales que explicarían la naturaleza última de lo real (el agua para, por ejemplo, Tales de Mileto, considerado el primer filósofo).

La identificación de tal principio supondría la existencia de un orden (racionalmente explicado) en el universo que el ser humano es capaz de conocer a través de su propia racionalidad y del análisis crítico. El universo deja así de ser un caos y pasa a convertirse en un cosmos ordenado según las leyes de la Naturaleza. El “paso del mito al logos” y el nacimiento de la Filosofía,

«La Nada» en si misma "es" aquello no definido de una forma i de alguna manera , a decir de un (concepto→ Idea que concibe a partir de un nombre→ que refiere nada / luego el entendimiento de ese nombre que no refiere nada) fundamental en filosofía, sobre el cual, o la cual, se ha escrito mucho y que del punto de vista ontológico (o estudio del ser / o de lo que es), se define→ como la ausencia e inexistencia de cualquier objeto; es decir→ de lo contrario u opuesto a la existencia o contrario a todo lo que es-ahí de alguna manera.

La ontología (estudio del ser) está asociada estrechamente con la cuestión de Aristóteles sobre "ser en cuanto ser": en relación a la cuestión de ¿Qué tienen en común todas las entidades (espaciales / de la realidad como conjunto) en el sentido más amplio? En este sentido los escolásticos, para los que el "ser en cuanto ser" subsistente es Dios mismo, lo han llamado→ el «ser puro»: y no hay más que ser, pero en toda la línea del ser, y esto separado y existiendo, siendo él (ser) en sí mismo —según Aristóteles— en una combinación luego de forma y materia / materia que es el sustrato material barionico sobre el que se encarna la forma / forma que después determina de lo heterogéneo i material barionico /es decir→ la pluralidad de los seres y/o formas que podemos reconocer principalmente por la vista / estos por separado y existiendo espacialmente o de un espacio dado dentro de (una) estructura espacial i/o matriz mayor (uno) , siendo (él (ser-ahí→ (ser de las cosas) i uno) en sí mismo.. y de todas la formas y seres que entendemos que son-ahí de la forma del espacio en uno/ una forma matriz (de campo energético) que los contiene a todos proyectados en el medio / y el medio en todo lugar (si lo queremos así entender de esta manera).

En cosmología, la materia bariónica es toda forma de materia constituida por bariones y leptones (a excepción de determinados tipos de neutrinos). Es decir, es la materia que forma todo lo que nos rodea y podemos ver, incluidos nosotros mismos. todo ello dentro de una estructura (de campo energético) o matriz vibracional→ o Lattice ( Dr. J Grinberg-Z) de sustancia vibracional energética que se entiende como aquello (que tiene carácter de base i constituyente del elemento fundamental de algo que no-es antes de una forma reconocible; pero que luego "es" de una forma y permaneciendo igual en su carácter fundamental de base, a pesar del los cambio propios de la materia) y con capacidad igual de reaccionar / es decir→ de recoger o proyectar-se de la información de la matriz (campo energético) / cuya información de campo (de la matriz) es capaz de mantener en evolución igualmente dicha estructura (de campo energético) o matriz que depende principalmente de su capacidad vibracional (frecuencia vibracional ).

Una matriz (de campo energético (M) en este caso seria (uno→ i matriz informacional o conjunto de información ( igual las formas son información definida de esta misma información) que puede definirse igualmente de la suma de sus partes que evolucionan dentro como y producto de suma de todas su partes y formas que son de la de inter-relaciones entre estas y/o sub-matrices (m), como aquellos elementos definidos dentro Una matriz (de campo energético (M) definidas del mismo espacio que las circunda) formado parte de dicha Lattice dentro de unos limites o frontera dados del limite la forma matriz (de campo energético (M) / que contiene dentro y de un borde las otras formas contenida de esta.

La materia antes y que "es" (la podemos entender desde una "sustancia vibracional energética que se entiende como aquello (que tiene carácter de base" antes de una manera la misma cosa que luego "es" no de la misma manera / después de otras formas→ la materia (como aquel sustrato cambiante) y principio de individuación / que de lo universal de antes que no-era n7 no-es de una forma percibida , y luego es de lo particular la materia bariónica / lo mismo de otra forma / no igual lo mismo de la misma manera de antes / pero manteniendo —esa materia cambiante hoy— su sustancia de base / es decir→ en si la materia como aquello mismo de otra manera antes i de la misma sustancia vibracional energética que de alguna manera mantienen en común todas las entidades en el sentido más amplio, y en cada una de ellas y de una forma concreta después de una forma la materia bariónica / donde la forma, a decir (de muchas i heterogéneas formas de la materia barionica) son, después y de su propia forma (i materia) en particular subsistiendo en estas la aquella base constituyente del elemento fundamental de algo que no-es antes de una forma reconocible τὸ ὄν / donde Alfonso García Marqués - Universidad de Murcia) propone que, además de mantener ente como su traducción, habría que introducir existente, como una traducción alternativa y complementaria o ente existente / y «Conviene tener en cuenta el modo en que debemos hablar de cada cosa (que es ente), pero no más que su modo de ser». Aristóteles - metafísica 11. et. Z, 4, 1030a, 27-28.

Algunas preguntas ontológicas, como por ejemplo ¿Qué es la materia? O ¿Qué es Dios? O ¿Qué es el espacio? O ¿Qué es el tiempo? O ¿Qué es el espacio-tiempo? Y en un grado mas subjetivo ¿Qué hace real (objetiva i/o subjetivamente) a un objeto? etc... Luego Muchas preguntas tradicionales de la filosofía antes i teológicas como ¿Existe Dios?, se pueden entender hoy como preguntas ontológicas, como por ejemplo:​ la pregunta por el ser / pero entendamos que la pregunta no hace real al objeto por el que que se pregunta / y del nombre que refiere algo (aun y a partir de una idea real) no hace real la tampoco a la idea que realiza al nombre. Y llegamos a un tipo de categorías: la categorías de las preguntas (que ha sido poco considerada en la filosofía) / que categorizan preguntas en función de si racionalmente tiene algún sentido estas preguntas que serian aceptables o no /en función de si son preguntas verdaderas en revelación a cosas o situaciones que son reales de verdad) y que proporciona respuestas verdaderas i reales (es decir que son pertinentes y de utilidad en nuestro camino de vida) sobre aquellas mismas cosas reales y situaciones que nos encontramos en la vida / luego independientemente del grado de verdad que aporten las respuestas estas serian reales, en tanto refieren la realidad de las cosas que nos son precisas para seguir con nuestra vida / o no lo serian, a de cir de aquellas preguntas que no proporcionan respuestas reales i en ningún grado verdaderas→ respecto a las cosas que son reales y útiles en nuestro propio camino e vida.

Ontoteológicamente hablando de la ontología del ser (de las cosas) y la teología de Dios "estudio" o "ciencia de dios" ¿podemos entender?, y por tanto como respuesta a una cuestión antes, luego afirmar / que es verdad / que ser y Dios son lo mismo, de la misma manera / Luego la verdad como concepto, o Idea que concibe o forma el entendimiento para entender el significado de lo que se refiere del sentido de la palabra Verdad podríamos definirlo (como concepto) que La verdad es→ la coincidencia entre una afirmación y los hechos, o la realidad a la que dicha afirmación referido de algo o alguna cosa se refiere. ​Sin embargo en la realidad entendemos nosotros una verdad absoluta no existe / existiendo muchos grados de verdad en una misma afirmación sobre algo (o pregunta sobre algo)→ que es verdad / pero antes decimos de alguna cosa de principio que es verdad pudiendo preguntar (cuando esa cosa y cuestión d la que se habla, habrá de ser una cosa concreta (el árbol de mi jardín existe y es verdadero) luego y en cierto grado una pregunta sobre una cosa concreta (el árbol de mi jardín) ya es una pregunta verdadera (que refiere y pregunta sobre algo verdadero) y obtendremos igualmente una respuesta en cierto grado de verdad / porque precisamente refiere y pregunta por lo que de verdad existe→ un árbol en mi jardín, que es verdad / y una respuesta verdadera en cierto grado ( el de conocimiento de mi árbol) que es de verdad / pero además de verdadero es un árbol real (y por tanto una repuesta real) y cuando me pregunten que tipo de árbol es, yo responderé→ un limonero y, por cierto... aquí, en mi casa esta está.

luego incluso puede ser verdadera una pregunta (pero no por ello real) cuando pregunta por aquello que no existe en la realidad / aunque se pregunte por aquello i un nombre que lo refiere... de algo / algo que luego no responde a una cosa concreta y el propio nombre no significa (nada concreto-ahí / es decir→ que no-es real / pero si... es de un nombre, y es verdad que existe (un nombre que nombra algo) luego es verdadera la pregunta por algo que se nombra que no es real, pero que es verdadero (de un nombre) pero que no-es el nombre significante de una cosa real «de las cosas mismas que son en si mismas en la naturaleza ». Lo que quiere decir que luego y de preguntar por el nombre.. que no se obtenga una respuesta real (con sentido luego hacia una experiencia real), aunque la respuesta sea verdadera en cualquier grado ( y ) a la vez de no tener ningún sentido.

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Desde ¿Qué es metafísica (24 de julio de 1929- Heidegger ). Hace muchísimo tiempo las ciencias, cuya razón última es buscar el ente, rechazó la Nada / si bien toda negación contiene (en si misma) la afirmación de aquello mismo que se niega. Luego no de la misma manera, la misma ciencia que antes negaba la nada (que es y repetimos de nuevo→ un concepto, después creyó encontrarla fuera (y de ese mismo concepto / antes entendido de la observación como ausencia) afirmándola en un vacío que, en rigor, no lo estaba, como ellos mismos admiten. Si bien, lo que no admiten es su error. Y llamo error de la ciencia al buscar fuera (o querer algunos entender fuera) lo que se revela solo dentro / antes de una expresión escrita en griego de alguien: ( τὸ ὄν→ el ser ) fuera y una cosa / después de buscar algo y de la ausencia manifiesta fuera de ese algo (es) después y la propia angustia ( que revela otra ausencia dentro) lo a veces a algunos ciega / entendiendo lo imposible afuera / sin entender lo que llevan en forma de ausencia y aquello que no-es ya dentro.

Pues del alcance de dicha experiencia, hay cierta comprensión, que iniciándose con Parménides se impone incluso hoy las facultades de filosofía, y que señala, que la nada no se puede decir ni pensar. “El gran Parménides, mi querido amigo, cuando comenzaba a hablar y concluía, en prosa o en verso, no cesaba de repetirnos esto a nosotros, que éramos niños, entonces: “No; jamás comprenderás que lo que no existe, lo que no-es existe. Haz que tu pensamiento en sus indagaciones se separe de esta senda”. Tal es el testimonio de Parménides (Sofista/ Platón). Luego sabemos que la ignorancia, es involuntaria en todas las almas; pero→ la ignorancia, para “un alma” que se lanza en busca de la verdad (entendamos verdad de todo y absoluta→ del universo), no es otra cosa que “la desviación de un pensamiento extraviado” (Sofista / Platón)].

Sin embargo y curiosamente, la concepción que tienen los científicos hoy de la Nada —al igual que hace 100 años— es “que saben de la Nada, en la medida precisa, en que de la Nada, nada quisieron saber:”—Heidegger. No entienden, ni ubican o ubican mal (lo que sea que creen entender). Sin embargo, si no se renuncia a esa aspiración obsesiva a la totalidad (querer saberlo todo de todo, sin ser una necesidad personal), si no se renuncia a la santificación de la ciencia omnicomprensiva (que pretende dar un sentido incluso a nada —y me remito a Stephen William Hawking y otros como él / que pretenden el universo conocido a partir de la nada— no se puede transformar el tejido sensible de nuestras experiencias, que implica “reconocerse a sí mismo de / y en lo extraño / y a la vez→ extraño de todo”. Así, la renuncia a la construcción de una realidad que comprende e incluye saberlo todo de todo el universo, descansa, como toda renuncia, en un encuentro o experiencia antes de ser hacia entender y saber de nada / para así poder acceder (a lo necesario personal en vida de cada uno) y entender un poco (lo preciso) de ese todo, para poder seguir nuestro camino. Sin embargo, encontramos que la ciencia en tanto más entiende de corpúsculos ha dejado de ignorar el tránsito (doloroso que supone de aquello y un nombre (La Nada) que refiere nada→ pretender-la y Nada). En nuestro caso / y diferente) nos movemos hacia aquello que "es" ya y una cosa→ un nombre-que es (escrito) y que por tanto refiere→ de la forma del que no refiere / (y calla acerca de algo) o refiere nada→ al ser interpelado / o tener que dar una explicación acerca de ese algo→ ¿Qué es metafísica (24 de julio de 1929- Heidegger )

Luego y en un discurso, el que habla de alguna cosa, hablará siempre de alguna cosa; y es evidente que, cuando pronunciamos “alguna cosa” y referimos nombrando o escribiendo “alguna cosa” queremos hablar y hablamos de un ser; porque emplear esta frase sola, por decirlo así, y separada de todos los seres (y como si de la nada→ la palabra NADA se hubiese escrito sola) es imposible. ¿No es así? Bien, y sentado esto, reconoceremos necesariamente que quien dice "alguna cosa" o escribe "alguna cosa" (aunque sea de la Nada dice o escribe de una cierta cosa→ nada (y lo mismo cuando quien dice o escribe nada refiere→ de una cierta cosa / que no refiere / o refiere nada→ un nombre / de alguna cierta cosa / y lo refiere al ser interpelado o tener que decir o escribir acerca de alguna cosa / es decir> de una cosa concreta . Porque quien habla o escribe (aunque sea refiriendo nada), al hacerlo y Heidegger lo hace / lo hace de “alguna cosa” y "alguna cosa" significa, al menos “de una cosa concreta” antes de lo que luego refiere nada→ ¿Qué es Metafísica? (24 de julio de 1929- Heidegger) La pregunta hace concebir la esperanza de que se va a hablar acerca de la metafísica. Renunciamos a ello. En su lugar vamos a dilucidar una determinada cuestión metafísica. De este modo nos sumergimos inmediatamente dentro de la metafísica misma:-) (pero no se adelanten / igualmente→ pues “el que no dice alguna cosa, es de toda necesidad, a mi parecer, que no diga absolutamente nada”) pues si al hablar: no se refiriese a nadie, ni a ti, ni a mí, ni al plato, ni (a ningún otro ser): aun y al hablar, (y observemos lo absurdo) no habría absolutamente, pues no se referiría a nada, porque es imposible un discurso sobre la Nada. Por consiguiente, no puede concederse que el que intente enunciar el NO-SER, es decir (“ “) hablará sin decir nada; antes bien, es preciso afirmar que no habla. (Y De esta manera, dejaríamos a un lado las dificultades de esta discusión) (Variaciones de el sofista / Platón).

Heidegger «volver a las cosas mismas», con ello quiso llevar hasta sus últimas consecuencias el principio fenomenológico que proclamaba la necesidad de «volver→ a las cosas mismas», sin necesidad de construcciones (metafísicas) o discursos metafísicos. Quiso romper el predominio de la teoría y de su tradicional esquema sujeto-objeto, y destacó la praxis como la forma primordial y privilegiada en la que el hombre accede al mundo y, consecuentemente, al ser; una forma que no precisa de conocimiento teórico porque es anterior a éste / lo mismo es decir: Praxis (del griego antiguo πρᾱξις (práctica), romanizado como praxis) aquel proceso por el que de una teoría (pensada), venida de una idea se realiza, referido al acto de involucrarse, realizar y practicar ideas 7 de otra manera lo mismo es : moverse hacia las ideas, ponerse en camino de la experiencia de las cosas mismas, de ahí→ «volver a las cosas mismas», sin necesidad de construcciones (metafísicas)

Schopenhauer percibió la tendencia a rechazar todo lo relativo a la nada en Occidente; Occidente emprendió una huida de la nada (y es comprensible cuando no se entiende→ menos aún lo que queremos decir al hablar de Nada antes (y dirigirnos a estudiantes, que lo mismo luego son de filosofía / y después referir o pensar la superación de la metafísica desde el diálogo que establece Heidegger con Friedrich Nietzsche, en la medida en que la filosofía de este último es la culminación de la filosofía y de toda su historia. Pero el problema es... que en esta época de fisura (Pániker) y autorretratos (Facebook), el pensamiento debe ensayar nuevos caminos y preguntarse / y de la im-posibilidad en algunos casos / dar un salto (equivocado entiendo en el caso de la ciencia al horizonte de la nada / para luego explicar-lo todo INCLUSO EL UNIVERSO MISMO a partir de lo opuesto a todo / del no-ser / pero ¿A qué es preciso dar la denominación de NO-SER?, ¿creéis que él (un filosofo o científico) sabría a qué objeto y cómo aplicarlo, y que podría explicarlo al que se lo había preguntado? Bien, es una pregunta difícil: pero al menos, un punto es claro de esta: que el NO-SER ( y aquello mismo que conlleva "el concepto" de La nada) no puede ser atribuido a ningún ser: Por consiguiente, si no puede ser atribuido a ningún ser: el que lo refiera a alguna cosa (y lo mismo del universo), lo hará sin razón, colocándose más que en contradicción consigo mismo: ridiculizándose a sí mismo. Luego, es cierto (y vale la frase de Plato a decir de Parménides) que jamás comprenderán que lo que no existe, lo que no-es existe / solo que de otra manera que no-es de la misma forma ( lo que existe ( pero lo mismo materia es) aquello en forma de onda (i microondas / de un campo energético (M?). Sin embargo, entiendo, que cuando empiezan las ideas a colapsar en una mente cartesiana y que necesita explicarse de1 plano sobre dos dimensiones / es una opción: siempre estar “en busca del Unicornio”→ decimos en españa, i de una novela y premio planeta.

La "Nada" es el vacío «aquello» que queda como una desesperación ciega que destruye este mundo. […] Las personas que no tienen esperanza (fe) son fáciles de dominar y quien tiene el dominio tiene el poder. Yo soy un servidor del poder, que surge después de la "Nada". Luego Ignoro si alguien (con mi edad) puede pensar en la Nada sin que le venga a la mente, aunque sea sólo aquella frase de “La historia interminable”. De no ser así, de no haber sucumbido al reino de “fantasía” durante aquel tiempo mágico de la niñez; y si no volaste con la imaginación entre las estrellas; y no te hiciste preguntas imposibles o absurdas que luego tú mismo tuviste que responder, es imposible: jamás entenderás mucho de lo que viene a continuación, pues al igual ,y cómo refiere Paul Auster→ "las historias solo suceden a quienes son capaces de contarlas; la realidad no existe si no hay imaginación para verla”. -

Pero si no hubiera un «aquello» no habría un «esto» . Si no hubiera un "esto" no habría instrumento para que sonaran al nombrarlos todos estos vientos. Pero ¿Cómo podemos comprender qué lo produce? Un viaje nos espera… “Un laberinto, la mente y una luz… y caos…. y más caos todavía y teorías, como sinfonías confusas… las ideas, danzando una ceremonia imperfecta... y todo, y después... “la Nada”, maniobrando… y la vida, como si fuese una luz, buscando… y de nuevo en el caos despejamos nubes , y atravesamos tinieblas, y todo en nuestro interior… y al salir de los silencios, cada uno verá su realidad… y solos frente a la luz, pensaremos… ¿Es posible? Tal vez, pero… ¿Entendimos? Tal vez, pero…” — (J. Maqueda).

Quizá todo lo que pretendo pueda entenderse a partir de una línea de pensamiento que se mantendrá sucinta en todos y cada uno de los siguientes textos: “la Nada, abierta a todas sus posibilidades” incluida, y sobre todo ((de no-ser))pues es esa su verdadera esencia (no ser), pero no sin antes considerar y tratar otras, cuantas posibilidades y exposiciones sean necesarias escuchar y si es necesario refutar. La nada aunque muchos no lo consideren de este modo, no es tema única y exclusivamente de confrontación y formación académica sino, igualmente, de intuición, calado de mente y apreciación“Reconociendo en ello la existencia de la posibilidad de nuevas concepciones (reales o no) sin necesidad de verlas, unas, o deduciéndolas de forma indirecta otras(como habíamos hablado sobre la propia ciencia cuando estudia más allá de nuestro planeta / con esa intuición o clarividencia) e igualmente no cerrando puertas, admitiendo esas otras posibilidades validas del pensar, de llegar más allá y ver más lejos de lo que hacen otros, ¿Qué quiero decir con esos otros? Pues, que cuanta más formación y cátedra más se radicalizan las posturas y posiciones enfrentadas hacia un lado y otro de lo inamovible: cientificista o filosófica, obviando unos y otros las posibilidades que se le ofrecen desde el lado contrario para mejor razonar; así como priorizar una mente abierta y no cerrada, esta última muy propia de las escuelas filosófico y científicas pues es lo que medra y razón última de ser hoy de las universidades: pensamiento único y no critico, amputando cualquier voz o aniquilando cualquier otra forma de pensar que no sea en línea a escuela o pensamiento dentro del actual paradigma. Por consiguiente, no habrá de tomarse consideración la posición de aquel que se atreve aquí, hoy, a incursionar en la Nada bajo riesgo de ser reprendido por superiores o perder su reputación, ni frente a la posibilidad dejar de ser como es, precisamente, por ser como es.

De la filosofía occidental que la hayamos en situación crítica / esto es un hecho; que no sirve para nada es un dicho, venido de una tradición que parece del todo agotada, visto el fracaso de sus teorías y un repetir y dar la vuelta siempre a las mismas cosas, explicadas de mil y una maneras, sin aportar luego nada nuevo o relevante a estas, olvidándose por completo de explorar nuevas formas de pensamiento y entender el mundo: no puede sostenerse aquello que se da de golpes contras sus propias paredes y a la vez da la espalda al mundo y a la realidad, a la entrada de un milenio que aguarda y del que algunos afirman: será un milenio moral y espiritual o no será, dada la grave deriva de acontecimientos en la que nos vemos envueltos. 

Pero este agotamiento académico, no puede ni debe descarriar nuestra atención hacia lo redundante, sobre aquello que se precisa en verdad, ni debe hacernos perder de vista la necesidad de unos nuevos planteamientos o formas de pensar renovadas, más cuando la filosofía parece haber olvidado su razón primera, y perdido su  orientación definitivamente, precisando ahora de esa movilidad libre en el pensamiento, como acto creador que disuelve aquellas doctrinas que impiden el debate. Luego, no son pocos los que opinan, que parecería existir algo interesado en mantener cierta oscuridad y confusión, y por tanto la ignorancia de todos: Pero en mi caso no me siento obligado a ser continuador de nada ya iniciado en la ignorancia, como tampoco entiendo preciso continuar con aquello (fracasado en su explicación con anterioridad). Cada cual piensa, y al pensar como al caminar uno dirige primero sus pasos hasta que estos luego lo dirigen a él. Por lo tanto elegir qué voy (yo) a pensar sería fantasear, en un mundo donde la realidad condiciona de antemano mostrando lo relevante (a quien se refleja de dicha realidad) la misma realidad natural que gusta de ocultarse a tantos.

Luego la verdadera decisión, o elección, sería negarse pensar “en aquello relevante” desviándose hacia lo improductivo e irrelevante (lo académico, podríamos decir) que por cierto a muchos agradaría: una existencia irreflexiva, bien pagada, insensible y ausente de la realidad. Si bien, más parece grave cuando, se te dice o dirige sobre qué, cómo o cuál es la forma apropiada de pensar.  En mi caso no me siento influenciado o dirigido en forma alguna2, y esto me permite una cierta libertad para maniobrar en un terreno en el que —todo hay que decirlo— se observa cierta intolerancia, sumado a esa recalcitrante aversión a abrirse al común de los mortales, cuando entiendo sería un gran paso, para el hombre ( i refiero al hombre español que piensa por sí mismo) y lo mismo para la humanidad: empezando por una correcta educación que enseñe a pensar y no tanto instruya a obedecer: “La necesidad o casi obligación de tener que apoyarse permanentemente en lo que dicen otros autores cuya valía, de alguna manera ha sido reconocida (pero no siempre probada) por la tribu a la que pertenece cada uno, que limita la comunicación e igualmente el diálogo a los fieles y seguidores de esos autores: y escuelas,  excluyendo a todos los demás, obligando luego a un acto de fe en lo se dice, o a ir a las fuentes que se usan como  referencia: (este pecado  / tal i como afirma  José Luis Cardero López / Universidad Complutense de Madrid  lo comete también este escrito aunque no de la misma forma, sino e otra manera hacia y contra lo mismo que se pronuncia (de la filosofía )”. 

Pero la ciencia no queda atrás. Una ciencia donde al ser escrutada con atención se observa, mantiene dos varas muy distintas de medir, dependiendo en tanto aquello que trata o estudia: fuera o dentro de nuestro planeta. En el primero de los supuestos  —aquello que sucede fuera de nuestro planeta— se muestra irreconocible y abierta de forma permanente a nuevas perspectivas, tesis y descubrimientos como los agujeros negros, la teoría de cuerdas, los pliegues del espacio-tiempo etc., reconociendo en ello la existencia de nuevas realidades sin necesidad de verlas, deduciéndolas de forma indirecta (mecanismo este, se quiera ver así o no: próximo a la intuición o clarividencia) no cerrando puertas, admitiendo su ignorancia y esas otras posibilidades validas del pensar. Sin embargo, veamos ahora en el otro supuesto muy distinto —aplicado para lo que ocurre aquí, en nuestro planeta— y enormemente reductor, donde todo tiene que ser medido, experimentado en laboratorio y sólo valido en tanto se puede comprobar directamente. Luego los sucesos que no encajen en las teorías supuestas al uso  se desprecian e ignoran o se les fuerza a encajar de cualquier modo incluso a costa de falsear la realidad. A primera vista se advierte diferencia: como si ambos niveles (de una misma ciencia) no estuvieran intrínsecamente relacionados. Lo que nos lleva a que en la práctica, algunos científicos se hayan convertido en los nuevos guardianes celosos de la ortodoxia, inquisidores de una religión: la ciencia, en ocasiones más dogmática e intolerante que la de siempre, y todo ello en nombre de una diosa llamada razón sectaria e intransigente (que solo mira dentro y fuera). Pero todo ello no nos lleva al error de despreciar o sobre criticar un pensamiento científico y sus logros,  sino a afirmar una obviedad: que el  método o paradigma no es suficiente, no alcanza para abarcarlo todo, y este debe ser complementado. solo añadir que no comulgaré con ruedas de molino sobre lo que filosofía o la ciencia ofrece, dando por sentado respecto a la nada, o sobre cualquier otra cosa, objeto de estudio en estos textos, pues esa “razón común a todos” ilustrada o no se atestigua, en desafiar lo ya aceptado enfrentando así las propias sombras: entablando diálogo con todo aquello que dogmáticamente la desafía y pone a prueba, sea en la forma que venga.

1- (La filosofía implica una movilidad libre en el pensamiento, es un acto creador que disuelve las ideologías. —Martin Heidegger)

2- (escuelas y universidades)


1 (1)

1-Por qué me hago preguntas
2-La necesidad como categoría social
3-Darle un sentido propio a nuestros actos
4-Mantenerse despiertos. ¿Por qué desconfiar?
5-Nuestra mente → es absurda: habiendo depositado esperanzas en la (ilustración).
6-El modo como pretendo hilvanar, en relación a diversas materias y sensibilidades.
7-«Toda observación es relativa al punto de vista afectando al fenómeno que se observa.

1 (2)

1-Et in Arcadia ego—
2-Acerca del trauma de la lucidez / Extraviarse en los tópicos—
3-El Laberinto del mino tauro y la paradoja—
4-Sobre el saber… y saber que somos impulsados—
5-Sobre la búsqueda de la felicidad—
6-Precipitarse hacia las propias consecuencias—
7-Una última y breve observación sobre el destino—
8-Acerca de la satisfacción de un deseo resuelto, en su representación—.
9-Hacia las profundidades del abismo—
10-En busca de sentido—
11-Acerca de una sociedad profundamente enferma—
12-Sobre los escenarios del absurdo—.

1 (3)

1-Acerca de la satisfacción de un deseo resuelto, en su representación—.
2-Acerca de una sociedad profundamente enferma—.
3-Acerca de una nueva, aunque ya pretérita teoría de la visión —
4-Acerca i-de la interpretación de Copenhague a una cuestión (idea antes —
5- La primera bifurcación —
6-Bajo la Fisura de Rolando—.
7-Monstruos —
8-Un lugar más allá de las sirenas·

1 (4)

-Unas palabras antes de comenzar o seguir (a quien esto le pueda interesar)—
-Acerca de un modo particular de pensar —
-Sólo del desconocimiento surge la verdadera angustia de vivir —
-Vivir es elegir—
-Y Del Instante i Uno después —
-libre en el Instante—
-Pero ¿Qué es el instante?—
-De una doctrina de los «tres mil aspectos contenidos en cada instante vital»—
-Del instante en la mística sufí—
-Pero ¿Progresamos? No lo sé—
-Por la palabra: el más peligroso de los bienes—
-Pero la palabra tiene además otros peligros —
-De La curiosidad Superficial, La Distracción: Y La Mente del Mono —
-El peligro de escuchar a todos y no escucharnos a nosotros mismos —
-Nadie dijo que la vida fuese fácil —
-Sartre considera que no existe la naturaleza humana —
-Mediocridad y Redes Sociales —
-De la ética venidera —
-La modernidad se construyó sobre la idea del sujeto (antes) pensado como individuo
-El hombre moderno “arrojado” de Heidegger, por completo en su cotidianidad—
-Del buen ciudadano, solo puedo decir
-De la mediocridad
-El sujeto encuentra en este punto cierta paz
-El “mediocre” no tiene idea del contexto en el que se desenvuelve
-El mediocre, o ciudadano como genio vanidoso, y señor del hablar repetidor
-Del reconocimiento y ascendencia social (el ciudadano) sujeto de opinión
-¿Culpable? No, no es un crimen el que (es) i-de la opinión (quien no conoce la verdad)

1 (5)

-Nada más trágico que nacer para luego tener que morir
-Sobre la muerte
-Pensar la existencia
-Buscando entender
-Cuando el suicidio se afronta desde la sociología o psicología (desde el ente social)
-Acerca de la voluntad de vivir
-Del auto-sacrificio
-Sobre la imposibilidad de convivir /o sobrevivir la realidad social
-Tomar conciencia de que podemos elegir
-Morir (socialmente, o precisamente por ello) precisa igualmente de razones
-Mainländer
-¿hay alguna lógica hasta la muerte? / Desde una lectura de Camus
-Cuando asumimos la responsabilidad de la existencia / vivir es elegir

1 (6)

-La humanidad: en cuestión desde nuestra perspectiva tradicional de la realidad
-Hacia un nuevo paradigma: Un nuevo hombre y una nueva era
-De La necesidad del nuevo hombre
-Hacia una nueva era
-Desde unas nuevas perspectivas cósmicas
-Sobre el conocimiento
-De Las grandes revoluciones o grandes cambios
-Desde la naturaleza del Hombre, y el hombre como problema
-El nuevo Ser (humano) hacia lo propio y de lo Humano
-El sentido de la vida (en general) o mejor y antes hacia hallar el sentido de la vida
-Mente, consciencia y cosmos
-Aislarse en el caos (desde el límite)

1 (7)

-Una primera aproximación al límite (desde Eugeni Trías
-Desde el vértigo y el abismo Observamos
-Y Trías deriva, como aquel marinero de tierra que no vio la mar y solo la soñó
- del descubrimiento de un Limite (que soñó) luego y como hallazgo en la filosofía.
-Trías descubre” la frontera" A decir de la universidad Pompeu Fabra
-Pero veamos, qué nos dice trías de “su frontera” y cómo él la define y sus habitantes
-Pero volviendo al método, tan propio del paradigma actual mencionado
-El vértigo real frente al abismo, o límite
-El sujeto fronterizo (necesario de la idea del límite) no-es- / i-de otra manera trías

1 (8)

-El lenguaje como sombra de la razón
-Para Wittgenstein, el mundo era lo expresable (solo en palabras)
-Luego ¿Qué me define el lenguaje?
-"Sólo pedimos un poco de orden para protegernos del caos
-Pero ya estoy en un espacio, en tanto mi forma ocupa un espacio definido
-Luego: Uno condicionado a través y de dicho en medio igualmente definido
-Sobre una filosofía autentica o pensar (desde una filosofía auténtica)
-Pero he hablado de acción y experiencia, y no puedo quedarme en lo relativo

1 (8-1)

-El Hombre Desesperado
-Sobre la Muerte
-El dolor y la pérdida
-El Sinsentido de la Existencia
-Pensar la idea del suicidio
-Libertad de Elección
-Morir precisa, igualmente, de razones.

1(9)

-La frontera un lugar para (Pensar uno: el Ser).
-En ese avance, antes en la frontera y en el borde exterior de la ola.
-El colono de estos nuevos territorios llega vestido con sus ropas.
-Pero (antes) Debemos preguntarnos qué atrae al límite a la experiencia de la frontera.
-Habitar-es-estar /Heidegger).
-Hay un viaje (y conocimiento a través de tinieblas y sombras que habitar.
- De las conclusiones fundamentales de un observador / del medio.

1(9)

-Un hombre en el castillo
-En el ámbito de la filosofía, a [Posteriori]
-De los niños
-Una forma más definida de crítica
-La ruta de la servidumbre
-El neoliberalismo
-"El pasado es recordado muchas veces dramático
-"El pueblo español se entrega al suicidio
-Respecto del sinsentido de la existencia
-Desde un estudio de PD. Ouspensky

1(0)

-De la razón instrumental―
-Las relaciones de fuerza y poder―
-La razón instrumental en la educación―
-cuando parece natural no querer seguir estudiando―
-En las escuelas: a los jóvenes hoy no les enseña a pensar (se les enseña a obedecer)
-Desde pequeños a los niños se les coloca en grupos fomentando la medianía
-hablamos de realidad social y la coercividad del estado hacia el individuo
-Las escuelas son lugares donde inculcan, más allá de materias, normas de conducta
-Por la palabra
-La palabra tiene peligros, de los que muchos dramáticamente inconscientes

-la palabra no sólo puede ser, sino es, la herramienta más peligrosa dada al hombre;