Todos sabemos la fecha en que cada año se juega la final de
la Champions Leage; igualmente, sabemos también que día empieza la nueva
temporada de esa serie que tanto nos gusta. Sin embargo, muy pocos saben que desde
el año 1998, y cada dos años, la WWF sorprende al mundo con la entrega de un
nuevo mensaje: un mensaje sombrío, por supuesto. Y La última publicación de este, casi temido Informe: Planeta Vivo 2020 parece oportuna pues, su mensaje basado en evidencia científica, resuena en nuestros oídos hoy, con mayor claridad que nunca. Pues esta vez contiene nuevos elementos, que deberían hacer que la humanidad adopte una mirada distinta en tanto a la relación que mantiene con el mundo. Este año el informe incluye, además de la versión completa y el resumen ejecutivo, otro documento para niños y jóvenes, y otro con testimonios y reflexiones individuales, además, de otros dos textos adicionales que nos ofrecen una visión más profunda del informe.
Al igual que en años anteriores, la conclusión es terrible. El índice “Planeta Vivo” nos muestra el declive de las especies de animales vertebrados. Globalmente, las poblaciones de mamíferos estudiadas, así como peces, aves, reptiles y anfibios han disminuido 68% de 1970 a 2016; en América Latina y el Caribe empeora la situación y esta cifra es más alarmante, con un promedio del 94% de disminución de las especies. Por supuesto, los motores de pérdida de biodiversidad son los mismos alrededor del mundo, sin embargo, son los países que están intentando acelerar su desarrollo económico, aquellos que sufren mayor intensidad en el impacto, y aunque el informe es básicamente en la misma línea alarmante que años anteriores, en esta ocasión demuestra, hasta dónde el descenso en la biodiversidad, se traduce en riesgos evidentes para la humanidad, tales como por ejemplo el covid19. Los organismos habitantes del suelo, especies de plantas e insectos, también están disminuyendo, lo que pone en riesgo muchos procesos de los que todos dependemos. La desaparición de los organismos que habitan el suelo afecta a los ciclos de nutrientes, lo que repercutirá en la producción vegetal, y dado el caso de que algunos insectos se extingan, muchas plantas podrían perder la capacidad de reproducirse.veo En relación a esto concretamente, no puedo olvidar cada vez que salgo a caminar por el campo, la cantidad de pesticidas que veo derramados en el suelo, bajo viñas y olivos en Extremadura (tierra de Barros), algo que debería estar penado, pero que parece ser que a nadie le importa. Hemos de recordar que al depender de suelos saludables, irrigación, organismos polinizadores y control biológico de plagas, la producción mundial de alimentos podría colapsar, en la medida que los ecosistemas dejen de ser óptimos a consecuencia de prácticas agropecuarias inadecuadas. Igualmente, la deforestación, el desperdicio y contaminación del agua, así como las emisiones de gases de efecto invernadero y la expansión de especies invasoras, son algunos de los factores que hacen, igualmente, de nuestros sistemas para la producción de alimentarios uno de los factores principales de la pérdida de la biodiversidad.
La salud humana es inherente a la salud del resto de la naturaleza, como lo hemos descubierto y aprendido a nuestro pesar con esta pandemia de covid-19. Si, entendemos que “ la salud” es el estado completo de bienestar físico, mental y social esta muy claro que el futuro de nuestra especie dependerá, de la forma en cómo nos relacionamos con el resto de los los seres vivos.
En esta edición de 2020, el Informe Planeta Vivo examinó el impacto que podrían tener en el planeta seis escenarios posibles: desde las formas actuales de producción y consumo, hasta un ejercicio que combina producción y consumo sostenible, a la vez que se incrementan acciones de conservación sobre indicadores de estado de biodiversidad. El resultado de estos modelos de trabajo parece contundente, y a la vez esperanzador: Urge asumir, a toda costa, la tarea de frenar, revertiendo la línea descendente de estos malos indicadores durante los próximos diez años, de forma que, para 2100, se encuentren en franca recuperación. Ya se que todos pensamos lo mismo: no diré qué: y aunque yo ya no estaré aquí para poder verlo, Si queremos una segunda oportunidad para el planeta y la especie humana, y con ello para toda la biodiversidad existente… debemos iniciarla de inmediato. saludos!!
Si quieres descargarte y leerte los informe originales, puedes acceder a los enlaces en nuestra pagina Pulsando aquí… ((INFORME PLANETA VIVO))
No hay comentarios:
Publicar un comentario